miércoles, 16 de abril de 2008

Uruguay I

He aprendido a amar a Uruguay. Es un gusto adquirido de grande porque mi padre -a pesar de haber sido concebido en Piripolis- quiso veranear siempre en Argentina. (Creo que estaba orgulloso de no conocer Punta del Este.)
De Uruguay amo las fiambrerías, las calles empedradas, los caminos que corren al lado de la costa, los prados vacíos, el mar perfecto. Amo lo cálido, la sencillez, la falta de pretensión...
Ayer rapté a mi amado, (Cuando digo mi amado, es "my beloved", mi marido, el que anteriormente fue conocido en este blog como Mr. Increible -marido de Elastichica.) Lo cité a Mr Increible en Puerto Madero para almorzar.Mientras él me esperba inocentemente en el restaurant de enfrente, hice el check-in y le mandé un mensaje diciendo que se cruce a la terminal de Buquebus. Cuando se enteró que se trataba de un secuestro express, largó una carcajada. Balbuceó algo de una reunión a las 3 en microcentro. "Qué pena", le dije. "Yo a las tres, voy a estar en Uruguay".
Hoy, en su cumpleaños, amanecimos en ese resort donde tantas veces me había querido llevar. A mi no me gustan los "resort". Estoy en contra del "resortismo" sean Club Med o Cuatro Estaciones, no es lo mío. Pero hete aqui que lo amo y es su cumpleaños.

Ahora, yo intento poner buena onda, pero ¿porqué la escenografía asiática? Es la polinesia a la americana en Uruguay. ¿No se puede tomar un lugar perfecto y dejarlo perfecto?

¿Porqué el Río de la Plata tiene que estar flanquedo por filas de totems balineses, yins, yans y buddhas sonrientes? En un momento, Mr Inc le pidió en su modo más adorable a una señorita si por favor le podía bajar la música zen porque no podía pensar.

Y ¿qué pasa con las yerberas? ¿No existe otra flor zen que flote en agua? Las están gastando.

No quiero ser mala onda, pero ¿hace falta?

(la vuelta la hicimos en la Cacciola. El pancho no era nada zen...)

7 comentarios:

Anónimo dijo...

pero que importa la moda asiatica, los totems esos, y la musica zen si lo maravilloso es que te secuestren y dejarse secuestrar.

A lo grande , como debe ser la vida, amiga!

Que tal el rescate?

elastichica dijo...

si, si ya sé. Eso me decía Mr Increible, que cree que yo me complico al divino cohete... Eso sí se divirtió bastante cuando yo me trepaba a los totems para lograr alguna foto (otra que el mellizo en las alturas...) Ahora tengo 23 fotos de buddhas y totems.

elastichica dijo...

El rescate se pagó en especie y en cómodas cuotas.

El Secretario dijo...

Hola señorita chica elástica.

Eso de los raptos sorpresivos es una idea muy loca, pero muy agradable y divertida.
My wife y yo también lo hacemos de vez en vez.

Y Uruguay, muy desconocido para mí.
Tu Argentina no la visité, pero casi: con ayuda de Borges, del Gigantesco Cronopio, De Bioy, de Silvina y tantos otros.

Abrazos.

P.S.: Gracias por tu visita a la Zona Libre.

Anónimo dijo...

la ultima foto si que es fulera , eso no es nada. No pretenderan vender esa escultura de Pier 1, que mas bien parece una mascara del Cirque du Soleil depilada con las orejas de Alsogaray, como asiatica?
ni ojos de china tiene!

Anónimo dijo...

la última es la reina de los pitufos...

elastichica dijo...

si,si la Pitufa Zen...
por fin pasás Brasil.